Uno de los argumentos que suele usar la izquierda cuando se critica a los inmigrantes es que el rechazo se basa en el desconocimiento, y según esta teoría si los conociéramos seguramente descubriríamos maravillados sus grandes virtudes y nos enriqueceríamos con las muchas cosas que nos pueden aportar. Esto, como con casi todos los argumentos de la izquierda, se ha repetido tantas veces que mucha gente ha terminado por tomarlo como una realidad incuestionable, casi un dogma de fe.
Pero es cuestionable, ¡ya lo creo que es cuestionable! Tan cuestionable que yo afirmo que es precisamente al contrario, e intentare argumentarlo.
No hace tantos años, cuando la comunidad latinoamericana en España era muy reducida, no recuerdo que se tuviera una percepción negativa de ellos, si me apuras incluso diría lo contrario. En aquel entonces muchos nos creíamos el cuento de los países hermanos de la madre patria y de lo mucho que nos apreciábamos mutuamente. Sí, lo sé, es una ingenuidad o peor aún una estupidez, pero confieso que soy tan tonto como el que más en muchas ocasiones.
Me lo creí a pie juntillas. Diré en mi descargo que me crié con programas de televisión como “Trescientos millones” y que no tenía el dudoso gusto de vivir rodeado de sudamericanos.
Y yo (ingenuo donde los haya) tenia un sincero aprecio por aquellos pueblos hermanos de allende los mares, pero en aquel entonces no era el único ¿quién sentía rechazo a los latinos hace veinte años? ¿Y hace quince? Sencillamente casi nadie.
¿Que ha ocurrido? Muy sencillo, que varios millones se han plantado en nuestro país y hemos convivido con ellos en nuestras calles, barrios, parques y les hemos conocido. Y ha sido entonces y no antes cuando nos han provocado un fuerte rechazo.
Luego, si cuando no habíamos convivido con ellos, no existía ningún rechazo y después de haber convivido sí, señores no se engañen ni nos tomen por tontos, el rechazo no surge del desconocimiento sino todo lo contrario: el rechazo surge de conocerles.
Otra prueba de esto es que en España el rechazo se produce en mucha mayor medida en las zonas donde mayor es su presencia ¿alguien conoce a algún paisano de una aldea perdida de Asturias con una presencia cero de inmigrantes, que sienta un fuerte rechazo hacia ellos? Yo al menos no lo he visto, pero en aquellos barrios donde su presencia es mayor, el rechazo que la población autóctona siente hacia ellos es enorme.
Lo siento por los progres y su creencia de que el rechazo nace del desconocimiento, pero los hechos nos demuestran que es precisamente lo contrario.
Por más que les duela, les rechazamos porque los conocemos.
Pero es cuestionable, ¡ya lo creo que es cuestionable! Tan cuestionable que yo afirmo que es precisamente al contrario, e intentare argumentarlo.
No hace tantos años, cuando la comunidad latinoamericana en España era muy reducida, no recuerdo que se tuviera una percepción negativa de ellos, si me apuras incluso diría lo contrario. En aquel entonces muchos nos creíamos el cuento de los países hermanos de la madre patria y de lo mucho que nos apreciábamos mutuamente. Sí, lo sé, es una ingenuidad o peor aún una estupidez, pero confieso que soy tan tonto como el que más en muchas ocasiones.
Me lo creí a pie juntillas. Diré en mi descargo que me crié con programas de televisión como “Trescientos millones” y que no tenía el dudoso gusto de vivir rodeado de sudamericanos.
Y yo (ingenuo donde los haya) tenia un sincero aprecio por aquellos pueblos hermanos de allende los mares, pero en aquel entonces no era el único ¿quién sentía rechazo a los latinos hace veinte años? ¿Y hace quince? Sencillamente casi nadie.
¿Que ha ocurrido? Muy sencillo, que varios millones se han plantado en nuestro país y hemos convivido con ellos en nuestras calles, barrios, parques y les hemos conocido. Y ha sido entonces y no antes cuando nos han provocado un fuerte rechazo.
Luego, si cuando no habíamos convivido con ellos, no existía ningún rechazo y después de haber convivido sí, señores no se engañen ni nos tomen por tontos, el rechazo no surge del desconocimiento sino todo lo contrario: el rechazo surge de conocerles.
Otra prueba de esto es que en España el rechazo se produce en mucha mayor medida en las zonas donde mayor es su presencia ¿alguien conoce a algún paisano de una aldea perdida de Asturias con una presencia cero de inmigrantes, que sienta un fuerte rechazo hacia ellos? Yo al menos no lo he visto, pero en aquellos barrios donde su presencia es mayor, el rechazo que la población autóctona siente hacia ellos es enorme.
Lo siento por los progres y su creencia de que el rechazo nace del desconocimiento, pero los hechos nos demuestran que es precisamente lo contrario.
Por más que les duela, les rechazamos porque los conocemos.
Muy acertada su reflexión. Así es.
ResponderEliminarAdemás, he observado que aquellos que los apoyan suelen tenerlos muy muy lejos.
La acusación de racismo les viene muy bien a esta gente. Por desgracia para nosotros, tienen acentos y colores diferentes, con lo que la acusación está servida.
Aunque fueran de aspecto anglosajón el rechazo estaría ahí; son sus repulsivas formas y mala educación lo que les ha ganado el desprecio de gran parte de la población
Totalmente deacuerdo con esta reflexión, sí señor
ResponderEliminarToda esta gente ha arruinado sus paises de origen porque no saben lo que significa trabajar y mucho menos respetar a los demas y convivir. Y todo esto lo estamos pagando ahora todos los españoles, como no empiecen las expulsiones de toda esta calaña lo llevamos claro.
ResponderEliminarLa situación de deterioro que se vive en el barrio de San Cristóbal de los Ángeles esta a punto de producir una quiebra en la convivencia vecinal. La sensación de inseguridad se esta viendo acrecentada por el aumento en los pequeños asaltos dejando casas y posesiones sin amparo y al alcance de este "lumpen social". A éste aumento en la "alarma social" contribuye en gran medida el comprobar como individuos sin oficio conocido, pero a los que se les presume actividades nada licitas, merodean por sus calles.Los pocos españoles que quedamos, estamos siendo empujados aabandonar hogares en los que quermos vivir, por el miedo que ellos nos producen y por el daño que puedan producir a nuestros hijos.
ResponderEliminarEn primer lugar quiero agradeceros a todos el tiempo dedicado a leer esta entrada y vuestra participación activa con vuestras respuestas. Quiero mandar ánimos al Anónimo de San Cristóbal de los Ángeles, expresarle mi solidaridad. Por desgracia cada día son más los españoles que se encuentran en barrios y situaciones similares. Siempre habrá algún pijo-progre afincado en un barrio exclusivo con una presencia cero de inmigración (salvo la del servicio doméstico) que tendrá el valor y el descaro de tacharle de xenófobo y racista por no querer sufrir lo que dicho individuo no quiere para sus propios hijos, a los que manda a colegios en los que los únicos inmigrantes son los hijos de algún diplomático extranjero. Y es que la multiculturalidad, para algunos, es fantástica, siempre que la sufran los hijos de los otros.
ResponderEliminarUn saludo
Gracias por los ánimos.
ResponderEliminarLos "buenistan" ya se han dado cuenta de que el "experimento San Cristóbal" ha fracasado con mas del 43% de inmigración legal, que si se le suma la ilegal, es abrumador el dato, La integración ha fracasado, la asimilación ha sido imposible, ya solo queda el éxodo de la población nacional, con lo que estamos ante el nacimiento del mayor gueto de Madrid junto a la Cañada Real, San Cristóbal de los Ángeles se mantiene gracias a ese pequeño tejido nacional, que se aglutina en torno a la parroquia y a la asociación de vecinos, cuando desaparezcamos San Cristóbal ser´tierra sin ley como ya lo es la Cañada, estamos en la fase en que a la inmigración se la recluye en guetos urbanos, junto a los obreros de desecho por el sistema.
Algún día tendremos que pedir cuentas a aquellos que en virtud de un delirio multicultural nos han empujado al borde del abismo.
ResponderEliminarCada vez más gente abre los ojos, no sólo en España sino en toda Europa. Esperemos que la población empiece a reaccionar antes de que alcancemos un punto de no retorno, al menos de un no retorno pacífico.
Totalmente de acuerdo con tus planteamientos, por otra parte yo opino que racismo no es el odio a otras razas o pueblos, es el amor a tu raza, por la que luchas para evitar agresiones de pueblos invasores.
ResponderEliminar