Tras la revolución rusa y ante los estrepitosos fracasos cosechados por el marxismo en sus intentos revolucionarios en Europa occidental, sus principales teóricos como Antonio Gramsci o los judeomarxistas de la Escuela de Frankfurt, empezaron a pensar que se imponía un cambio de estrategia.
Según Gramsci, en lugar de intentar tomar el poder por la fuerza para posteriormente iniciar una revolución cultural desde arriba, en Occidente se imponía la estrategia contraria: se debía cambiar primero la cultura y a continuación el poder caería en manos del marxismo como fruta madura, educando al pueblo que terminaría aceptando e incluso anhelando la revolución.
Para llevar a cabo un lavado de cerebro es bien conocido que antes de crear la nueva personalidad del individuo habrá que destruir primero todo lo que es y todo en lo que cree. La psicología de masas no es muy distinta, antes de inculcar en las masas nuevas creencias y valores uno debe tomarse la laboriosa tarea de destruir todo cuanto constituye una seña de identidad de dicha cultura, todas sus creencias y principios. En este caso había que destruir la civilización occidental.
Y de esta forma se emprendió una tarea ingente que comenzó con la toma de las instituciones en el mundo del arte, el cine, el teatro, la prensa, la televisión... La estrategia propuesta por Gramsci se ha demostrado correcta, los ataques a cualquier principio en el que sustentar la civilización occidental han sido llevado a cabo con éxito, libertad sexual, destrucción de la familia, religión, el valor del esfuerzo frente a la gratificación inmediata, la excelencia, etc. Pero esto no era suficiente, aún había que conseguir que odiáramos todo cuanto durante siglos habíamos sido, en definitiva, que nos odiáramos a nosotros mismos y a todo lo que representábamos en el mundo.
Es mi intención recalcar y denunciar en este artículo cómo con medias verdades o con abiertas mentiras, a los hijos de Occidente se nos está induciendo a odiarnos y a despreciar los frutos de una cultura como la nuestra, que una vez fue considerada por propios y extraños como la más desarrollada y la que más aportaciones había hecho a la humanidad.
Intentemos desintoxicarnos un poco y sobre todo intentemos desintoxicar a nuestros hijos, porque con patrañas como la que desenmascara el magnífico articulo de Thomas Sowell, que les dejo a continuación, son con las que están educándoles en las escuelas. Si no luchamos por la verdad, si no luchamos por nuestra cultura, terminará desapareciendo pisoteada por una generación de occidentales criados para odiarse a si mismos (algo que ya está ocurriendo).
"Hace muchos años, me llevé una sorpresa cuando recibir una carta de una vieja amiga en la que me decía que le habían dicho que yo me negaba a recibir visitas en el campus procedentes de África.
Por aquel entonces yo estaba tan atareado que accedí a ver a un único visitante del campus de Stanford; y da la casualidad de que era africano. Acertó a presentarse en un momento en que me estaba tomando un descanso.
En fin: a mi amiga le dije que aquél que tal le dijo igual pudiera haberle dicho que yo me niego a hacer paracaidismo con negros; y, ciertamente, me niego a tirarme en paracaídas con negros... y con blancos y con asiáticos y con cualquier hijo de vecino.
No soy el único que ha sido víctima de confusiones de este tipo. De hecho, confusiones de este tipo están provocando distorsiones mefíticas y de hondo calado en nuestro país, los Estados Unidos de América.
Volvamos de nuevo la vista a la cuestión de la esclavitud. La de la esclavitud es una historia muy dolorosa, no sólo por el trato dispensado los esclavos, sino por lo que su propia existencia dice de la especie humana: porque esclavos y esclavistas, no lo olvidemos, ha habido de todos los colores, credos y lugares.
Si la historia de la esclavitud debe enseñarnos algo, es que no podemos poner en manos de unos seres humanos un poder ilimitado sobre otros seres humanos, con independencia del color o el credo de unos u otros. La historia del antiguo despotismo y el moderno totalitarismo traslada prácticamente el mismo mensaje tinto en sangre.
Pero no es eso lo que se enseña en nuestras escuelas y colegios, lo que nos muestran el cine y la televisión. No. El mensaje que se lanza una y otra vez es que los blancos esclavizaron a los negros.
Y sí, es cierto. Pero como lo es aquello que dice al principio de que no practico paracaidismo con negros. Y sus implicaciones son igual de falsas.
En fin: los europeos esclavizaron a africanos de la misma manera que los norteafricanos esclavizaron a europeos: a más europeos que esclavos africanos hubo en Estados Unidos y las Trece Colonias.
El trato que se dispensaba a los esclavos blancos condenados a galeras era aún peor que el dispensado a los negros en las plantaciones de algodón. Pero no hay películas ni series de televisión que hablen de ello; películas o series como Raíces. Por supuesto, tampoco se habla de ello en nuestras escuelas y universidades.
El trato inhumano con que unos seres humanos tratan a otros seres humanos no es una novedad ni, mucho menos, algo extraordinario. No hay por qué ocultarlo; entre otras cosas, porque podemos extraer algunas lecciones. Pero tampoco hay por qué distorsionarlo y presentar unos pecados de toda la especie humana como propios o exclusivos de una sociedad o raza determinada.
Si la sociedad estadounidense y la civilización occidental se diferencian en algo de las demás sociedad y civilizaciones es, precisamente, en que en un momento dado se volvieron contra la esclavitud; y lo hicieron en un momento en que las sociedades no occidentales seguían practicándola y se resistían a las presiones occidentales encaminadas a ponerle fin.
Sólo el hecho de que Occidente fuera predominante hizo posible la erradicación de la esclavitud en numerosas sociedades no occidentales en la época del imperialismo occidental. Sin embargo, hay estadounidenses que se van a África a pedir perdón por la esclavitud; ¡a África, donde la esclavitud no está, ni mucho menos, erradicada!
No es sólo la historia de la esclavitud lo que es objeto de distorsión torticera. Quienes hurgan en la historia de la minería para socavar los cimientos de la sociedad estadounidense o de la civilización occidental tienen muy poco interés en la Marcha de la Muerte de Bataan o en las atrocidades perpetradas por imperios como el otomano. Este tipo de gente no busca la verdad, sino oportunidades para denigrar a sus propias sociedades, o agravios con los que hacer caja a expensas de gente que ni siquiera había nacido cuando se cometieron esos pecados del pasado por los que claman.
Un antiguo proverbio dice: 'A cada día, su propio mal'. Al parecer, no les basta, a tantos de nuestros educadores, intelectuales, medios de comunicación. Están empeñados en emponzoñar el presente con el veneno del pasado."
Thomas Sowell
Espero que les haya gustado, confío en que haya ayudado a despertar alguna conciencia dormida y por último decir a todo aquel que pueda estar sospechando que el señor Thomas Sowell sólo es otro maldito supremacista blanco, que el autor no sólo no es un supremacista blanco sino que es un afroamericano orgulloso de serlo. Vaya desde aquí mi más profundo reconocimiento por su claridad de ideas, por su prosa envidiable y sobre todo por su honradez intelectual que le empuja a decir la verdad aunque sea políticamente incorrecta y aunque le suponga la enemistad de una buena parte de la comunidad negra internacional.
A modo de repaso, y antes de que algún progre me mande un comentario desafortunado, que en todo caso no pensaba publicar, (aunque les parezca mentira siempre hay algún ingenuo que se cree que después de tener la práctica totalidad de los medios de comunicación y el sistema educativo para difundir su basura, aún pueden venir aquí a soltarla ¡¡Lo llevan claro!!). Pues bien, como iba diciendo, para víctimas de la progresía del pensamiento único les dejo unos datos históricos que creo que serán de su interés.
El primer movimiento antiesclavista nació en Gran Bretaña en 1787, con una reunión de doce personas "profundamente religiosas", en una época en que el Imperio Británico lideraba el comercio de esclavos. Liderados por cristianos y financiados por empresarios conservadores, empezaron un debate que nunca antes había existido, pero décadas más tarde lograron que el parlamento prohibiera primero el tráfico de esclavos, más tarde la esclavitud y, finalmente, que un Imperio Británico en su apogeo impusiera esas prohibiciones al resto del mundo.
Sin embargo, aunque poco a poco los demás países occidentales fueron prohibiendo la esclavitud, fuera de Occidente la abolición se impuso a sangre y fuego, aprovechando la enorme superioridad tecnológica y militar de la que disponían. El imperialismo, especialmente el imperialismo británico, fue la herramienta que sirvió para destruir el comercio de esclavos y reducir la prevalencia del esclavismo en todo el mundo.
Barcos británicos entraban en aguas de Brasil para hundir barcos de esclavistas y se amenazó al imperio otomano con hacer lo mismo con los suyos si no aceptaban la prohibición. Años después, los norteamericanos erradicarían la esclavitud de Filipinas, los holandeses de Indonesia, los rusos de Asia Central y los franceses en sus colonias africanas y caribeñas.
Y es que, fuera de Occidente, no había nadie que entendiera muy bien esa manía que tenían contra el esclavismo. En el imperio otomano afirmaban que era una institución crucial para la vida y los hábitos de todos sus habitantes. Los maoríes lo veían como algo sin importancia, una más de sus costumbres. En Zanzíbar, su gobernante se negó a prohibir el esclavismo por miedo a perder la lealtad de sus súbditos. Si en Brasil, el último país occidental en abolir la esclavitud, hubo grandes demostraciones de alegría en las calles el día de la emancipación, en muchas zonas del imperio otomano hubo una revolución cuando el sultán prohibió el tráfico, que no la posesión, de esclavos.
Generalmente los multiculturalistas afirman que se debe tratar a todas las culturas por igual, porque carecemos de un marco objetivo que nos permita evaluarlas, aunque en la práctica eso les sirve de excusa para denigrar a la civilización occidental y exaltar a todas las demás. Una de las herramientas a las que más recurren es a la historia de la esclavitud o, más exactamente, a la escasa "memoria histórica" de la gente, que sólo recuerda la de Estados Unidos porque es la que aparece en las películas. Sin embargo, si algo hay que muestre la enorme superioridad de la cultura occidental sobre las demás es precisamente la historia del fin de la esclavitud, una imposición de Occidente al resto del mundo.
Estos datos son un extracto del articulo "El Occidente acabó con la esclavitud"
¿Por qué no enseñan esto en nuestras escuelas? ¿Por qué no enseñan que fue precisamente Occidente el que, incluso haciendo uso de la fuerza, terminó con la esclavitud? ¿Por qué no sale en los documentales de televisión? ¿Por qué no se hacen series de televisión del tipo Kunta Kinte en que el protagonista sea un europeo esclavizado en un reino musulmán? Ah, sí, se me olvidaba no lo hacen porque entonces no tendrían cómo enseñar a nuestros hijos a odiar a la civilización a la que pertenecen.
Ahora que usted ha accedido a una pequeña parte de la información que sistemáticamente esta sociedad del pensamiento único le niega en la dictadura de lo políticamente correcto, le animo a releer estas noticias que posiblemente viera en su día y saque sus nuevas conclusiones.
Primer pacto PSOE-PP: una Memoria Histórica para los negros esclavizados
"La Comisión de Igualdad del Congreso de los Diputados votará el próximo miércoles dos iniciativas de PSOE y PP para reparar moralmente las injusticias producidas a la comunidad negra a causa de la esclavitud."
Socialistas piden compensación por esclavitud
"Socialistas, socialdemócratas y laboristas de África occidental exigieron a los países que recibieron esclavos procedentes de este continente el pago de compensaciones por 400 años de explotación."
Al parecer los centenares de miles de occidentales esclavizados durante siglos, que vivieron y murieron en condiciones infinítamente más lamentables que las sufridas por los negros de las plantaciones de América, han sido totalmente olvidados por el PPSOE, a pesar de que muchos de estos esclavos fueron compatriotas nuestros.
Desde la España musulmana, los árabes realizaban periódicas incursiones o aceifas para saquear y arrasar los reinos ibéricos cristianos de la península, consiguiendo botín y esclavos. Por ejemplo, en una incursión realizada contra la ciudad de Lisboa en el año 1189, Yaqub al-Mansur, califa de los Almohades, se apoderó de 3.000 cautivos entre mujeres y niños, mientras que su gobernador en Córdoba, en un ataque posterior contra la ciudad de Silves en 1191, se apoderó de otros 3.000 esclavos cristianos.
Los árabes esclavizaron a un número sustancial de europeos. Según Rober Davies entre 1.000.000 y 1.250.000 europeos fueron capturados por los corsarios berberiscos, vasallos del Imperio Otomano y vendidos como esclavos entre los siglos XVI y XIX. Estos esclavos eran capturados principalmente de las poblaciones costeras de Italia, España, Portugal, Francia y en menor medida de lugares más lejanos como Inglaterra, los Países Bajos, Irlanda y excepcionalmente en lugares tan apartados como Islandia y Norteamérica. El impacto de los ataques berberiscos y otomanos fue devastador: Francia, Inglaterra y España perdieron miles de barcos, y muchas poblaciones costeras fueron casi abandonadas por sus habitantes. Las incursiones de los piratas otomanos desanimaron el asentamiento en la costa hasta el siglo XIX.
La guerras de los turcos otomanos en Europa, así como los ataques de los mongoles y tártaros en Europa también llevaron a muchos esclavos europeos al mundo musulmán.
Tampoco estaría de más recordar a nuestros políticos y a la víctimas de la Logse que, a pesar de los esfuerzos realizados por el mundo occidental para erradicar la esclavitud en el mundo, ésta perduró durante buena parte del siglo XX y no precisamente en los países occidentales, por mucho que se empeñen en demonizarnos.
Desde aproximadamente el siglo VII hasta la década de 1960 el comercio árabe de esclavos continuó bajo una forma u otra. El sultán de Marruecos Ismael ibn Sharif “El Sanguinario” (1672-1727) tenía una guardia personal de 150.000 esclavos negros, llamada la Guardia Negra, con la que mantenía la sumisión de su reino. Relatos y referencias históricos mencionan con frecuencia la presencia de esclavos entre las propiedades de la nobleza de Arabia, Yemen y otros países árabes hasta la década de 1920. En 1953, los jeques de Qatar que acudieron a la coronación de la reina Isabel II del Reino Unido tenían esclavos entre sus servidores, y seguían teniéndolos en una nueva visita 1958.
Hacia la década de 1950 la población de esclavos de Arabia Saudí se estimaba en unas 450.000 personas, aproximadamente el 20 % de la población. Se estima que hasta 200.000 mujeres y niños negros de Sudán fueron esclavizados durante la Segunda Guerra Civil Sudanesa. La esclavitud en Mauritania fue oficialmente abolida por leyes sucesivas en 1905, 1961 y 1981, pero no fue criminalizada hasta agosto de 2007. Se estima que hasta 600.000 mauritanos negros (un 20% de la población del país) se encuentran actualmente trabajando en situación de esclavitud debido a deudas que no pueden afrontar.
El comercio árabe de esclavos en el Océano Índico, el Mar Rojo y el Mar Mediterráneo es muy anterior a la llegada significativa de los europeos al continente africano. Los descendientes de los esclavos africanos llevados a Oriente Medio por el comercio de esclavos todavía viven allí en la actualidad y son conscientes de sus orígenes africanos.
¿Qué se apuestan a que esto no se lo enseñarán a su hijo en clase cuando estudien la esclavitud?
Según Gramsci, en lugar de intentar tomar el poder por la fuerza para posteriormente iniciar una revolución cultural desde arriba, en Occidente se imponía la estrategia contraria: se debía cambiar primero la cultura y a continuación el poder caería en manos del marxismo como fruta madura, educando al pueblo que terminaría aceptando e incluso anhelando la revolución.
Para llevar a cabo un lavado de cerebro es bien conocido que antes de crear la nueva personalidad del individuo habrá que destruir primero todo lo que es y todo en lo que cree. La psicología de masas no es muy distinta, antes de inculcar en las masas nuevas creencias y valores uno debe tomarse la laboriosa tarea de destruir todo cuanto constituye una seña de identidad de dicha cultura, todas sus creencias y principios. En este caso había que destruir la civilización occidental.
Y de esta forma se emprendió una tarea ingente que comenzó con la toma de las instituciones en el mundo del arte, el cine, el teatro, la prensa, la televisión... La estrategia propuesta por Gramsci se ha demostrado correcta, los ataques a cualquier principio en el que sustentar la civilización occidental han sido llevado a cabo con éxito, libertad sexual, destrucción de la familia, religión, el valor del esfuerzo frente a la gratificación inmediata, la excelencia, etc. Pero esto no era suficiente, aún había que conseguir que odiáramos todo cuanto durante siglos habíamos sido, en definitiva, que nos odiáramos a nosotros mismos y a todo lo que representábamos en el mundo.
Es mi intención recalcar y denunciar en este artículo cómo con medias verdades o con abiertas mentiras, a los hijos de Occidente se nos está induciendo a odiarnos y a despreciar los frutos de una cultura como la nuestra, que una vez fue considerada por propios y extraños como la más desarrollada y la que más aportaciones había hecho a la humanidad.
Intentemos desintoxicarnos un poco y sobre todo intentemos desintoxicar a nuestros hijos, porque con patrañas como la que desenmascara el magnífico articulo de Thomas Sowell, que les dejo a continuación, son con las que están educándoles en las escuelas. Si no luchamos por la verdad, si no luchamos por nuestra cultura, terminará desapareciendo pisoteada por una generación de occidentales criados para odiarse a si mismos (algo que ya está ocurriendo).
"Hace muchos años, me llevé una sorpresa cuando recibir una carta de una vieja amiga en la que me decía que le habían dicho que yo me negaba a recibir visitas en el campus procedentes de África.
Por aquel entonces yo estaba tan atareado que accedí a ver a un único visitante del campus de Stanford; y da la casualidad de que era africano. Acertó a presentarse en un momento en que me estaba tomando un descanso.
En fin: a mi amiga le dije que aquél que tal le dijo igual pudiera haberle dicho que yo me niego a hacer paracaidismo con negros; y, ciertamente, me niego a tirarme en paracaídas con negros... y con blancos y con asiáticos y con cualquier hijo de vecino.
No soy el único que ha sido víctima de confusiones de este tipo. De hecho, confusiones de este tipo están provocando distorsiones mefíticas y de hondo calado en nuestro país, los Estados Unidos de América.
Volvamos de nuevo la vista a la cuestión de la esclavitud. La de la esclavitud es una historia muy dolorosa, no sólo por el trato dispensado los esclavos, sino por lo que su propia existencia dice de la especie humana: porque esclavos y esclavistas, no lo olvidemos, ha habido de todos los colores, credos y lugares.
Si la historia de la esclavitud debe enseñarnos algo, es que no podemos poner en manos de unos seres humanos un poder ilimitado sobre otros seres humanos, con independencia del color o el credo de unos u otros. La historia del antiguo despotismo y el moderno totalitarismo traslada prácticamente el mismo mensaje tinto en sangre.
Pero no es eso lo que se enseña en nuestras escuelas y colegios, lo que nos muestran el cine y la televisión. No. El mensaje que se lanza una y otra vez es que los blancos esclavizaron a los negros.
Y sí, es cierto. Pero como lo es aquello que dice al principio de que no practico paracaidismo con negros. Y sus implicaciones son igual de falsas.
En fin: los europeos esclavizaron a africanos de la misma manera que los norteafricanos esclavizaron a europeos: a más europeos que esclavos africanos hubo en Estados Unidos y las Trece Colonias.
El trato que se dispensaba a los esclavos blancos condenados a galeras era aún peor que el dispensado a los negros en las plantaciones de algodón. Pero no hay películas ni series de televisión que hablen de ello; películas o series como Raíces. Por supuesto, tampoco se habla de ello en nuestras escuelas y universidades.
El trato inhumano con que unos seres humanos tratan a otros seres humanos no es una novedad ni, mucho menos, algo extraordinario. No hay por qué ocultarlo; entre otras cosas, porque podemos extraer algunas lecciones. Pero tampoco hay por qué distorsionarlo y presentar unos pecados de toda la especie humana como propios o exclusivos de una sociedad o raza determinada.
Si la sociedad estadounidense y la civilización occidental se diferencian en algo de las demás sociedad y civilizaciones es, precisamente, en que en un momento dado se volvieron contra la esclavitud; y lo hicieron en un momento en que las sociedades no occidentales seguían practicándola y se resistían a las presiones occidentales encaminadas a ponerle fin.
Sólo el hecho de que Occidente fuera predominante hizo posible la erradicación de la esclavitud en numerosas sociedades no occidentales en la época del imperialismo occidental. Sin embargo, hay estadounidenses que se van a África a pedir perdón por la esclavitud; ¡a África, donde la esclavitud no está, ni mucho menos, erradicada!
No es sólo la historia de la esclavitud lo que es objeto de distorsión torticera. Quienes hurgan en la historia de la minería para socavar los cimientos de la sociedad estadounidense o de la civilización occidental tienen muy poco interés en la Marcha de la Muerte de Bataan o en las atrocidades perpetradas por imperios como el otomano. Este tipo de gente no busca la verdad, sino oportunidades para denigrar a sus propias sociedades, o agravios con los que hacer caja a expensas de gente que ni siquiera había nacido cuando se cometieron esos pecados del pasado por los que claman.
Un antiguo proverbio dice: 'A cada día, su propio mal'. Al parecer, no les basta, a tantos de nuestros educadores, intelectuales, medios de comunicación. Están empeñados en emponzoñar el presente con el veneno del pasado."
Thomas Sowell
Espero que les haya gustado, confío en que haya ayudado a despertar alguna conciencia dormida y por último decir a todo aquel que pueda estar sospechando que el señor Thomas Sowell sólo es otro maldito supremacista blanco, que el autor no sólo no es un supremacista blanco sino que es un afroamericano orgulloso de serlo. Vaya desde aquí mi más profundo reconocimiento por su claridad de ideas, por su prosa envidiable y sobre todo por su honradez intelectual que le empuja a decir la verdad aunque sea políticamente incorrecta y aunque le suponga la enemistad de una buena parte de la comunidad negra internacional.
A modo de repaso, y antes de que algún progre me mande un comentario desafortunado, que en todo caso no pensaba publicar, (aunque les parezca mentira siempre hay algún ingenuo que se cree que después de tener la práctica totalidad de los medios de comunicación y el sistema educativo para difundir su basura, aún pueden venir aquí a soltarla ¡¡Lo llevan claro!!). Pues bien, como iba diciendo, para víctimas de la progresía del pensamiento único les dejo unos datos históricos que creo que serán de su interés.
El primer movimiento antiesclavista nació en Gran Bretaña en 1787, con una reunión de doce personas "profundamente religiosas", en una época en que el Imperio Británico lideraba el comercio de esclavos. Liderados por cristianos y financiados por empresarios conservadores, empezaron un debate que nunca antes había existido, pero décadas más tarde lograron que el parlamento prohibiera primero el tráfico de esclavos, más tarde la esclavitud y, finalmente, que un Imperio Británico en su apogeo impusiera esas prohibiciones al resto del mundo.
Sin embargo, aunque poco a poco los demás países occidentales fueron prohibiendo la esclavitud, fuera de Occidente la abolición se impuso a sangre y fuego, aprovechando la enorme superioridad tecnológica y militar de la que disponían. El imperialismo, especialmente el imperialismo británico, fue la herramienta que sirvió para destruir el comercio de esclavos y reducir la prevalencia del esclavismo en todo el mundo.
Barcos británicos entraban en aguas de Brasil para hundir barcos de esclavistas y se amenazó al imperio otomano con hacer lo mismo con los suyos si no aceptaban la prohibición. Años después, los norteamericanos erradicarían la esclavitud de Filipinas, los holandeses de Indonesia, los rusos de Asia Central y los franceses en sus colonias africanas y caribeñas.
Y es que, fuera de Occidente, no había nadie que entendiera muy bien esa manía que tenían contra el esclavismo. En el imperio otomano afirmaban que era una institución crucial para la vida y los hábitos de todos sus habitantes. Los maoríes lo veían como algo sin importancia, una más de sus costumbres. En Zanzíbar, su gobernante se negó a prohibir el esclavismo por miedo a perder la lealtad de sus súbditos. Si en Brasil, el último país occidental en abolir la esclavitud, hubo grandes demostraciones de alegría en las calles el día de la emancipación, en muchas zonas del imperio otomano hubo una revolución cuando el sultán prohibió el tráfico, que no la posesión, de esclavos.
Generalmente los multiculturalistas afirman que se debe tratar a todas las culturas por igual, porque carecemos de un marco objetivo que nos permita evaluarlas, aunque en la práctica eso les sirve de excusa para denigrar a la civilización occidental y exaltar a todas las demás. Una de las herramientas a las que más recurren es a la historia de la esclavitud o, más exactamente, a la escasa "memoria histórica" de la gente, que sólo recuerda la de Estados Unidos porque es la que aparece en las películas. Sin embargo, si algo hay que muestre la enorme superioridad de la cultura occidental sobre las demás es precisamente la historia del fin de la esclavitud, una imposición de Occidente al resto del mundo.
Estos datos son un extracto del articulo "El Occidente acabó con la esclavitud"
¿Por qué no enseñan esto en nuestras escuelas? ¿Por qué no enseñan que fue precisamente Occidente el que, incluso haciendo uso de la fuerza, terminó con la esclavitud? ¿Por qué no sale en los documentales de televisión? ¿Por qué no se hacen series de televisión del tipo Kunta Kinte en que el protagonista sea un europeo esclavizado en un reino musulmán? Ah, sí, se me olvidaba no lo hacen porque entonces no tendrían cómo enseñar a nuestros hijos a odiar a la civilización a la que pertenecen.
Ahora que usted ha accedido a una pequeña parte de la información que sistemáticamente esta sociedad del pensamiento único le niega en la dictadura de lo políticamente correcto, le animo a releer estas noticias que posiblemente viera en su día y saque sus nuevas conclusiones.
Primer pacto PSOE-PP: una Memoria Histórica para los negros esclavizados
"La Comisión de Igualdad del Congreso de los Diputados votará el próximo miércoles dos iniciativas de PSOE y PP para reparar moralmente las injusticias producidas a la comunidad negra a causa de la esclavitud."
Socialistas piden compensación por esclavitud
"Socialistas, socialdemócratas y laboristas de África occidental exigieron a los países que recibieron esclavos procedentes de este continente el pago de compensaciones por 400 años de explotación."
Al parecer los centenares de miles de occidentales esclavizados durante siglos, que vivieron y murieron en condiciones infinítamente más lamentables que las sufridas por los negros de las plantaciones de América, han sido totalmente olvidados por el PPSOE, a pesar de que muchos de estos esclavos fueron compatriotas nuestros.
Desde la España musulmana, los árabes realizaban periódicas incursiones o aceifas para saquear y arrasar los reinos ibéricos cristianos de la península, consiguiendo botín y esclavos. Por ejemplo, en una incursión realizada contra la ciudad de Lisboa en el año 1189, Yaqub al-Mansur, califa de los Almohades, se apoderó de 3.000 cautivos entre mujeres y niños, mientras que su gobernador en Córdoba, en un ataque posterior contra la ciudad de Silves en 1191, se apoderó de otros 3.000 esclavos cristianos.
Los árabes esclavizaron a un número sustancial de europeos. Según Rober Davies entre 1.000.000 y 1.250.000 europeos fueron capturados por los corsarios berberiscos, vasallos del Imperio Otomano y vendidos como esclavos entre los siglos XVI y XIX. Estos esclavos eran capturados principalmente de las poblaciones costeras de Italia, España, Portugal, Francia y en menor medida de lugares más lejanos como Inglaterra, los Países Bajos, Irlanda y excepcionalmente en lugares tan apartados como Islandia y Norteamérica. El impacto de los ataques berberiscos y otomanos fue devastador: Francia, Inglaterra y España perdieron miles de barcos, y muchas poblaciones costeras fueron casi abandonadas por sus habitantes. Las incursiones de los piratas otomanos desanimaron el asentamiento en la costa hasta el siglo XIX.
La guerras de los turcos otomanos en Europa, así como los ataques de los mongoles y tártaros en Europa también llevaron a muchos esclavos europeos al mundo musulmán.
Tampoco estaría de más recordar a nuestros políticos y a la víctimas de la Logse que, a pesar de los esfuerzos realizados por el mundo occidental para erradicar la esclavitud en el mundo, ésta perduró durante buena parte del siglo XX y no precisamente en los países occidentales, por mucho que se empeñen en demonizarnos.
Desde aproximadamente el siglo VII hasta la década de 1960 el comercio árabe de esclavos continuó bajo una forma u otra. El sultán de Marruecos Ismael ibn Sharif “El Sanguinario” (1672-1727) tenía una guardia personal de 150.000 esclavos negros, llamada la Guardia Negra, con la que mantenía la sumisión de su reino. Relatos y referencias históricos mencionan con frecuencia la presencia de esclavos entre las propiedades de la nobleza de Arabia, Yemen y otros países árabes hasta la década de 1920. En 1953, los jeques de Qatar que acudieron a la coronación de la reina Isabel II del Reino Unido tenían esclavos entre sus servidores, y seguían teniéndolos en una nueva visita 1958.
Hacia la década de 1950 la población de esclavos de Arabia Saudí se estimaba en unas 450.000 personas, aproximadamente el 20 % de la población. Se estima que hasta 200.000 mujeres y niños negros de Sudán fueron esclavizados durante la Segunda Guerra Civil Sudanesa. La esclavitud en Mauritania fue oficialmente abolida por leyes sucesivas en 1905, 1961 y 1981, pero no fue criminalizada hasta agosto de 2007. Se estima que hasta 600.000 mauritanos negros (un 20% de la población del país) se encuentran actualmente trabajando en situación de esclavitud debido a deudas que no pueden afrontar.
El comercio árabe de esclavos en el Océano Índico, el Mar Rojo y el Mar Mediterráneo es muy anterior a la llegada significativa de los europeos al continente africano. Los descendientes de los esclavos africanos llevados a Oriente Medio por el comercio de esclavos todavía viven allí en la actualidad y son conscientes de sus orígenes africanos.
¿Qué se apuestan a que esto no se lo enseñarán a su hijo en clase cuando estudien la esclavitud?
Gran artículo, Winston. Aprovecho, si es menester, para transcribir unas palabras de David Duke de su libro Supremacismo Judío que pueden ser también esclarecedoras sobre el tema de la esclavitud.
ResponderEliminar"(…) Yo también retenía en la memoria, en esa época, la imagen hollywoodiana de unos hombres blancos, generalmente sudistas, embarcándose hacia África, apresando a los nativos negros para el tráfico de esclavos. En películas, artículos y libros, los esclavistas eran anglosajones con apellidos como Smith y Jones. Generalmente eran unos tipos borrachos y toscos sudistas. Más tarde aprendí que la esclavitud era general en África entre los mismos negros nativos y que raramente eran apresados por blancos. Por regla general, eran los esclavistas negros quienes los vendían a los traficantes de esclavos."
"(…) Cuando era joven, cuando leía sobre la esclavitud en el Sur, mi corazón se conmovía tanto con las historias de crueldad y sufrimientos que me sentía culpable. Pero cuando supe la verdad sobre el tráfico de esclavos, me di cuenta de que los mismos escritores, productores y editores judíos que me habían infundido culpabilidad, ninguno de ellos, ni una sola vez, sugirió que los judíos "tenían una culpabilidad colectiva por un programa de 2.000 años de su implicación en el comercio de carne humana".
Aparentemente, en la nueva moralidad de la prensa judía, enterarse de la explotación blanca de los negros es "historia", y enterarse de la explotación judía de los blancos y negros se llama "odio"."
Bien en mencionar lo de la auto-culpa. Yo he llegado a escuchar, e incluso a decir, cuando tendría unos 16 años: “me siento culpable de ser blanco”. La autoculpa es un fenómeno que se cuece desde la infancia, el hombre blanco debería despojarse del sistema educativo presente y dejar de crecer con libros-propaganda marxista-cultural; nos quieren hacer sentir culpables de los logros de nuestra raza, de nuestro bienestar, de tener un plato de comida... todo esto despierta en el hombre pena y lástima y de ahí el mestizaje y toda la contaminación y decadencia en el hombre blanco. Yo conozco bien este asunto, lo conozco personalmente, mi despertar fue una lucha terrible. Por ello conozco al progre y su miseria. Hay que huir de la podredumbre. Además, la sociedad… sé lo que es que se metan con uno mismo por ser blanco, que te llamen nazi por tener los ojos azules y la presión social de “ir a la playa” para coger color. Este hecho no es casualidad, el lavado de cerebro ha sido muy eficaz. Espero que algún día los blancos europeos y eurodescendientes se miren al espejo y que como yo se desprendan de todos los libros marxistas y se pregunten: ¿qué me estoy haciendo? Después de la pregunta o pasarán a la acción hacia el buen fin: defender tu raza, tu sangre, tu patria… o seguir con el lento suicidio programado por los marxistas culturales.
Hace tiempo escribí sobre el tema de la autoculpa, espero que sea de interés.
http://www.mundodaorino.es/2010/02/ejemplo-de-literatura-progre-un-paseo.html
Lo curioso es que esto es un tema negado por la inmensa mayoría. Si lo comentas te tildan de loco o de que te lo estás inventando. El secreto de tanto éxito de la propaganda marxista cultural es que se ha inoculado en el inconsciente colectivo sin que nadie se diera cuenta.
En fin…
Hasta pronto Winston, que te vaya estupendamente.
Sin acritud a los anglosajones anti esclavistas creo que los españoles tenemos la primicia en ello, por ejemplo Colón a la vuelta de su 2º viaje en Abril de 1.496, trajo 300 esclavos indígenas de La Española, Isabel y Fernando al recibirle y escuchar en Audiencia los frutos del viaje, reprendieron severamente a Colón por los esclavos y le mandaron liberarlos y repratiarlos pues era contrario a la enseñanza de Dios. Este es solo un ejemplo.
ResponderEliminarContinuando con Carlos I, prohíbe desde el principio la esclavización de los indios en reiteradas Cédulas y Leyes reales (1523, 1526, 1528, 1530, 1534, Leyes Nuevas 1542, 1543, 1548, 1550, 1553, 1556, 1568, etc.), o la autoriza solamente en casos extremos, acerca de indios que causan estragos o se alzan traicionando paces -caribes, araucanos, chiriguanos-.
En 1530, por ejemplo, en la Instrucción de la Segunda Audiencia de México, el Rey prohíbe la esclavitud en absoluto, proceda ésta de guerra, «aunque sea justa y mandada hacer por Nos», o de rescates.
Al Emperador le llegaban asimismo informaciones y solicitudes favorables a la esclavitud de los indios, formuladas no sólo por conquistadores y encomenderos, sino también por religiosos dominicos y franciscanos, que, al menos en algunos lugares especialmente bárbaros, «aconsejaron la servidumbre de los indios», contra la primera idea de los Reyes Católicos -"(esto lo he citado de López de Gomara, Hª General I de las Indias, escrito desde México 1.552)"-. Ojo primera idea de los Reyes Católicos.
Los españoles en Indias aducían contra la prohibición de la esclavitud que siendo hombres de armas y al no ver provecho en la conservación de los prisioneros los matarían, ya que muchas veces ese era el botín, además que no pudiendo amenazar a los Indios con el cautiverio poco podrían hacer contra las rebeliones y que nadie con la prohibición se embarcaría en nuevas exploraciones por el costo de guerrear contra Indios hostiles. Todo esto hizo en algunos momentos flaquear al respecto al Emperador Carlos I cuando en 1534 autoriza de nuevo la esclavitud bajo estrictas condiciones.
Inmediatamente después empiezan las reacciones de los anti esclavistas españoles, el Oficial Real don Vasco de Quiroga -"Diré lo que siento, con el acatamiento que debo, que la nueva provisión revocatoria de aquella santa y bendita primera [1530] que, a mi ver por gracia e inspiración del Espíritu Santo, tan justa y católicamente se había dado y proveído, allá y acá pregonado y guardado sin querella de nadie, que yo acá sepa"-.
Las Leyes Nuevas de 1542, y las que siguen a la gran disputa académica de 1550 entre Bartolomé de las Casas (Obispo, Filósofo y Jurista anti esclavista) y Ginés de Sepúlveda (Jurista y Filósofo pro esclavitud), reafirmaron definitivamente la tradición anti esclavista de la Iglesia y la Corona. Así en 1553 ordena el Emperador Carlos I «universalmente la libertad de todos los indios, de cualquier calidad que sean», y encarga a los Fiscales proceder en esto con energía, «de forma que ningún indio ni india deje de conseguir y conservar su libertad».
A partir de entonces y a medida que la Iglesia se fue implantando en las Indias se persiguió a los esclavistas sin importar su condición o cuna, siendo los esclavos liberados.
Que grandes fueron los españoles desde Colón que aun siendo Genovés debe de considerarse español por hacer tamaña gesta al servicio de la Corona, hasta .... quien sabe.
Salu2.
Gracias Winston por la información. Jamás hubiera pensado que los turcos llegaron con sus naves hasta las costas de USA e Inglaterra. Increible. Ustedes, españoles, saben que los ingleses son muy vanidosos con el tema naval y se jactan de haber derrotado a la mejor armada de todos los tiempos que fue la vuestra. Tal vez por ese desmedido orgullo anglosajón, no admitieron los hechos (no digo que tengan que caer en el victimismo judío pero hay que denunciar los atropellos para luego combatirlos).
ResponderEliminarALGÚN DÍA, CUANDO EL MUNDO SEA GOBERNADO NUEVAMENTE POR LA RAZA BLANCA ARIA NI JUDÍA, TENDREMOS QUE EXPLORAR TODO EL PLANETA OTRA VEZ EXCAVANDO Y DESENTERRANDO EL PASADO. ESTOY SEGURO QUE QUEDAN MUCHAS COSAS POR DESCUBRIR DEBAJO DE LA TIERRA O EN EL FONDO DE LOS MARES. POR EJEMPLO, HACE UNOS AÑOS UNOS CIENTÍFICOS ALEMANES DESCUBRIERON EN PERÚ LA TERCERA CATARATA MÁS GRANDE DEL MUNDO. ESTO PASÓ HACE MENOS DE CINCO AÑOS.
Ojalá Dios nos dé fuerza para escribir la historia tal cual la vio Él: El mundo sabrá que los buenos fueron los malos y viceversa.
Saludos a ti y a tus lectores. Felicitaciones por el blog y gracias por la buena información.
www.fuerzaeuropa.blogspot.com
ResponderEliminarMusulmanes y religión islámica. Moros en Europa, Todo sobre la inmigración en España.
Los musulmanes y su religión islámica causará la decadencia de Europa, convirtiéndola en Eurabia. Los moros no tienen reparos en imponer su cultura sobre la nuestra. ¡DETENGAMOS LA ISLAMIZACIÓN YA!
Sin ánimo de contradecirte, pues estoy de acuerdo con la exposición que haces del tema, es interesante tener en cuenta un aspecto que, si bien incide lateralmente en tu artículo sin cuestionar la base, no deja de ser verdad (creo):
ResponderEliminarEs interesante y en cierta manera sospechoso observar cómo los movimientos antiesclavistas históricamente aparecen en paralelo con la Revolución Industrial y los cambios que produjo ésta en la mano de obra y su relación con el mercado.
Visto con una cierta perspectiva, coinciden los movimientos antiesclavistas con la sistemática sustitución de la mano de obra esclava por maquinaria industrial. La mecanización generalizada de la producción fue más rentable que la escasa producción a manos de esclavos desmotivados y caros de mantener.
De la misma manera, poniendo el ejemplo de los negros americanos, cuando se les impuso su nuevo estado "libertad" sin habérselo preguntado ni mucho menos haberlo ellos reclamado ni conquistado, las emergentes fábricas del país consiguieron mano de obra más barata que los blancos a los cuales estaban contratando y, por descontado, pudiéndoselos echar de encima cuando no interesara su explotación.
Muchos trabajadores blancos perdieron sus trabajos con el fin de la esclavitud y los negros, en cierta manera cambiaron de amo, con algunas mejoras, puede, pero con mucha desprotección. En cierta manera, con la excusa de los derechos humanos y argucias por el estilo, se los quitaron de encima cuando ya no hacían falta. Todavía hoy deambulan desorientados por las calles de Estados Unidos.
La última tomadura de pelo que les han hecho es la aparición de este monigote de Barak Hussein Obama para acabar de cretinizarlos, pintándolo como si fuera el representante de su dignidad restaurada. Realmente, pobres negros.
Os recomiendo, sobre todo este tema, una película de Lars Von Trier llamada Manderlay.
ResponderEliminarhttp://www.filmaffinity.com/es/film417020.html
Aquí el tráiler en inglés:
http://www.youtube.com/watch?v=FH0q5xcigtw
Yo escribí sobre la película hace bastante.
“El contrato es, en cierta medida, pues, una esclavitud negociada; es más, y siendo más cruel, la abolición de la esclavitud dio el paso hacia el derecho a la esclavitud, aunque sea hacia una esclavitud digna.”
Aquí podéis leer el artículo:
http://www.mundodaorino.es/2008/03/manderlay-democracia-es-esclavitud-y.html
Hasta pronto.
Tripallocavipasec desarrolla una idea muy interesante que va en la línea que poca gente sabe y es que muchos esclavos lucharon junto con sus amos en defensa de sus haciendas en la guerra de secesión norteamericana; y es que la relación amo-esclavo de aquella época se basaba mas bien en el paternalismo y compromisos mutuos que no en el vasallaje o servidumbre; por ello algunos esclavos temían quedar en el desamparo como así fue, después de la guerra.
ResponderEliminarCuriosamente me he dado cuenta que en los últimos años tenemos a trabajador@s de cuello blanco que han estado o están trabajando para su señorito por menos de un plato de comida y se creen que son privilegiados.Me explico:
Una de las causas de la guerra civil en España o lucha de clases, etc., se decía que eran las condiciones infames en que trabajaba el campesinado.Muchas veces por un plato de comida y una miseria de dinero; pues bien, en estos momentos hay trabajadores de Banca o Cajas de Ahorro que pagan por cuota de hipoteca a su "señorito" mayor importe que el sueldo neto que perciben de ese "señorito".Es decir no les queda ni para comer.
Como se puede aguantar eso, pues trabajando la pareja, no teniendo hijos y sobre todo teniendo una nube de créditos, préstamos, tarjetas de crédito, etc.,Y encima pensarán que estan mejor que aquellos campesinos de los años 30.Estos campesinos de los años 30 con su trabajo, con su plato de comida y un duro son los ascendientes del empleado de Banca y este empleado de Banca, sin embargo ha sido otro colaboracionista en el desastre de la nación, desidioso en la invasión migratoria, votante del partido único y segundas marcas o abstencionista, que dejará como descendencia ser comida para gusanos o polvo para ser barrido.
Winston, por favor; qué ha sido del enlace al blog de una española que estaba en Islandia que lo mismo había temas de manga, defensa de los animales, que temas del 3ºReich.
ResponderEliminarGracias
Te refieres a Brighid y su blog Blud und Boden. Desapareció hace un tiempo, el enlace era http://europainvicta.blogspot.com/, parece que lo ha dado de baja, aunque quizás puedas encontrar aún algo en el caché de Google. Siento no poder darte más información.
ResponderEliminarUn saludo
Hay un blog que se llama Europa Invicta, aunque no sé si es de Brighid:
ResponderEliminarhttp://europa-invicta.blogspot.com/
Hasta pronto.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEn primer lugar quiero pediros a todos disculpas por la tardanza en la respuesta a vuestros comentarios, pero no siempre uno dispone del tiempo que desearía para atender a los amigos.
ResponderEliminarAmigo Daorino, muchas gracias por las referencias de David Duke, muy interesantes y muy bien traidas.
Alvaro, gracias por los datos, ciertamente el artículo quedaba cojo sin hacer una referencia a lucha contra la esclavitud que también los españoles, junto con el resto de Occidente, llevamos a cabo. Dudo mucho que el destino de los aborígenes del continente americano hubiera sido el mismo de haber sido colonizados por otra civilización como los árabes, por mucho que les guste quejarse de los españoles.
Un saludo Dios de Dioses, efectivamente es algo que no conoce mucha gente, es increíble la cantidad de cosas que en esta era mal llamada de la información se oculta a la población.
Tripallocavipasec, un muy interesante punto de vista el que has aportado, no he sido capaz de recordar dónde lo leí pero recuerdo el testimonio de un sureño que antes de la guerra de secesión, en una visita a una de las factorías del norte y viendo las condiciones de vida de sus trabajadores, comentaba que nunca en ninguna plantación del sur había visto a los negros en unas condiciones tan precarias y lamentables.
Anónimo, así es, de hecho en el libro La Muerte de Occidente de Patrick H. Buchanan que desde aquí recomiendo a todo el mundo, aparece una cita que cuando tenga tiempo buscaré, en la que un general sureño hace mención y alabanza a los soldados negros que lucharon en sus filas.
Anónimo dijo...
ResponderEliminarWinston, por favor; qué ha sido del enlace al blog de una española que estaba en Islandia que lo mismo había temas de manga, defensa de los animales, que temas del 3ºReich."
Tiene nueva dirección: http://elmundodebrighid.blogspot.com/
Muy interesante texto, me lo guardo.
ResponderEliminarQue no sea el último